¿Xenofobia en el Atletismo?

>> jueves, 26 de marzo de 2015

Recientemente dos hechos me han llamado mucho la atención, por un tema que está latente en la sociedad española y de vez en cuando rebrota por cualquier causa.

El primero se produjo en una entrada que realizó Recaredo Agulló en su Facebook sobre el campeonato de España de Cross, en el que dos atletas se retiraron de la prueba. A raíz de este hecho y dado que ambos son Africanos, comenzaron a realizarse muchos comentarios, bastante desafortunados, acerca del derecho de ambos a representar a la Federación Valenciana en dicho campeonato.

En primer lugar, se debería dejar claro que según la legislación actual:
"Las federaciones deportivas españolas son entidades asociativas privadas, sin ánimo de lucro y con personalidad jurídica y patrimonio propio e independiente del de sus asociados, que además de sus propias atribuciones, ejercen por delegación funciones públicas de carácter administrativo, actuando en este caso, como agentes colaboradores de la Administración pública"
y por lo tanto son las propias federaciones las que deciden qué atletas, entre sus federados, las representan en los distintos campeonatos. Estos dos chicos, están federados por la FACV y por ello tienen el mismo derecho que cualquier otro federado a formar parte de la selección. Esas son las normas, lo demás, sobra. A partir de ahí, se puede discutir si las normas son correctas o no, si su elección fue acertada o no, pero nunca por el lugar donde hayan nacido. En ningún momento están quitando nada a nadie, como alguno comentaba.

Si estos chicos fueran, franceses, alemanes o italianos y corrieran más lentos, ¿se hubiera montado esta polémica? Pues probablemente, no.

El otro caso al que aludía es la pérdida del récord de Europa de Fabián Roncero a manos de Mo Farah y sus desafortunadas declaraciones al respecto: "Para mí, lo que ha batido Farah es el récord de Somalia".

No sé exactamente quien debe dar los carnets de europeos, pero entraríamos en una polémica imposible de resolver: Si Mo Farah, en vez de venir con 8 años a Europa hubiera nacido en Londres, ¿ya tendría derecho a ostentar el récord europeo? Si un etíope se casa con una española, ¿sus hijos se consideran europeos aunque sean negros? ¿se debería obtener un perfil genético de los atletas para dar el carnet de Europeo? ¿qué es ser Europeo?.

En fin, mil cuestiones más que se podrían plantear, ante tal despropósito. Aunque lo peor de todo, no es la opinión de Fabian Roncero, lo peor son algunos comentarios que se pueden leer por las redes sociales al respecto.

El mundo ha cambiado, Europa es multiracial y multicultural. Parafraseando a Pío Baroja: "La xenofobia se cura leyendo y el nacionalismo viajando", muchos de los males de la sociedad española vienen por ahí "no hay verdadera democracia si no hay cultura, si tenemos a un pueblo analfabeto", como bien describe Pérez Reverte en la gran entrevista que podéis ver a continuación:

http://www.lasexta.com/programas/sexta-noche/entrevistas/arturo-perezreverte-hay-verdadera-democracia-hay-cultura_2015031400166.html

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